Sí, tu cumpleaños

Dentro de unas horas, venía al mundo una persona de apariencia juvenil, débil, jovial y endeble; pero realmente llegaba una persona con mucha experiencia, seria, fuerte, trabajadora, humilde y ante todo honesta. Os extrañara que hable de un recién nacido así pero soy de las personas que cree que tenemos muchas vidas y que vamos encadenando unas a otras. Volviendo a lo que nos atañe. Una mañana dura de invierno del 15 de enero del 1975, yo llevaba varios años en este mundo maravilloso dando quebraderos de cabeza a mis padres y a pocos meses que mi hermano viniese acompañarme. Imagino que sería un día de los llamados normales en Zaragoza, es decir, con mucho frío y con un cierzo bastante fuerte. El clima en Zaragoza es bastante duro y por eso creo que puede hacer a su gente que sea dura, austera, sencilla, trabajadora, humilde y sobre todo majica, pues. Pasando unos minutos del mediodía venía al mundo, Susana. Una niña bastante atractiva, sencilla y estoy seguro que no lloró por no molestar, que es una de sus mayores cualidades y a la vez un problema, además tampoco lloró porque Susana nunca quiere que la gente se preocupe de ella, estoy seguro que con esos ojos color castañita que tiene estuvo pendiente de que pasaba a su alrededor y ver si alguién tenía algun problema para poder echar una mano a la persona que lo pidiese, aunque la niña sólo pesase apenas cuatro kilitos de simpatía, fuerza, energía, cariño y cabezonería. Susana ya estaba en este mundo al que casi 32 años después, ella sigue marcando su vida a la búsqueda de su felicidad y a la ayuda al prójimo. Susana es una de las personas que merece la pena conocer, querer, amar y sobre todo abrazar. Tiene la facilidad de aportar muchas cosas con sus ojos sonrientes, vivos, juveniles, sencillos y duros como los de una castaña que se agarra al árbol que la dio la vida. Su mirada te dice cosas, te acoge, te protege y sobre todo te habla. Es una persona con alma y que lucha por ser cada vez mejor persona aunque a veces, como nos pasa a todos, se deja llevar por situaciones que la pueden sobrepasar. Ella vino al mundo para hacer feliz a los suyos, a los demás, a nosotros; pero también vino para hacerse feliz a ella misma y por eso desde estas humildes líneas le pido que piense en ella y en sus quehaceres, que de reojo nos miré para así no perder de vista sus obligaciones como persona dedicada a los demás. Susana tiene el alma de una persona de otro tiempo, y eso le hace tener sabiduría y quizá unos valores -está muy de moda la palabrita- Ya sabéis lo que pienso, las palabras le damos sentido nosotros. Como decía unos valores de otro tiempo, de otro tipo de hombres y mujeres que pensaban en que el hombre, el medio ambiente, todo ser vivo que está en este hermoso planeta debía sentirse importante y que su opinión, sus hechos importaban. Personas que eran honradas, trabajadoras, responsables, humildes y sobre todo respetuosas con el diferente y con el que quería buscar un beneficio al planeta y al ser humano como habitante de el. Cielo, has aprendido mucho durante estos años, en algunos aspectos te has hecho a ti misma. Has ido superando etapas con nota y te ha hecho ser mejor persona, pensadora, reflexionar, ver tus defectos y sobre todo perdonar; ver la vida de manera optimista y pensar que cada vez que te levantas, lo que harás en unas horas, hay un jilguero cantando fuera de casa y dirás. Estoy viva, que bello es todo esto, que orgullosa estoy de lo que tengo. Tuve la suerte de conocerte una noche de noviembre, no sé si fue las energías que están circulando constantemente alrededor de los seres humanos, pero ese día conocí a una persona muy parecida a mí, que quiero que sea mi compañera, amiga, amante y sobre todo el ser humano al que pueda ayudar, abrazar, mirar, charlar, reir y que yo desde mi humildad le de ese punto de equilibrio que todo ser humano necesita. Mi mano está tendida a tí, amor. Intentaré ser tu escudero en esta dura travesía pero como en toda aventura conseguiremos llegar a la orilla de ese mar azul que refleja tu piel cuando mis manos la acarician. Tu esfuerzo tendrá recompensa. Me siento muy orgulloso de ser tu chico, compañero y de como vas buscando siempre el frente y aunque te caes, sigues levantándote para conseguir estar bien contigo misma. Cariño, te quiero por tus defectos que tus virtudes ya las conozco. Por último, pedirte que eches la vista atrás y recuerdes todas esas imágenes de tu niñez, adolescencia, juventud, de estos años y que pienses que por todo ello. Yo, te quiero. Tu pasado, no lo viví pero desde el día que te conocí ya forma parte de mi vida. Sonríe amor y recuerda que muchos te tienen presente y te ayudan para que todo te vaya mejor. Los quince más o menos que somos por aquí te mandamos todo el amor que mereces.

Cariño, eres muy importante y además me considero importante. Mil besiños, i love you